La tecnología 5G llama de forma cada vez más insistente a la puerta del transporte y la logística. La necesidad de ganar velocidad, seguridad y mejorar la experiencia de los usuarios se hace más apremiante en el sector, obligando a las empresas a mover ficha en sus agendas de implantación.
¿De qué hablamos al hablar de 5G?
El 5G hace referencia a la quinta generación de redes móviles. Un avance que trae consigo un aumento significativo de la velocidad en las comunicaciones -por ejemplo, en las descargas-, en la latencia -tiempo de respuesta de la red-o en el aumento del número de dispositivos conectados compartiendo información en tiempo real.
¿Qué supone esta tecnología para la logística y el transporte?
Mayor seguridad y transparencia: el 5G amplía las posibilidades de seguimiento y control en cada fase del proceso logístico. El acceso a la información en tiempo real ofrece mayores garantías y control sobre el estado y movimiento de las mercancías.
Optimización de tiempo y recursos: con esta tecnología se refuerzan las posibilidades de localización en cada momento tanto de las flotas como de las cargas, así como la seguridad. Habrá mayor planificación y optimización de las rutas, al disponer de información compartida entre vehículos e infraestructuras que permitirán tomar las mejores decisiones.
Vehículos y maquinaria conectados y autónomos: hablamos de la posibilidad de contar con maquinaria y vehículos que informarán sobre las necesidades de mantenimiento, localización o notificación de incidencias, entre otros aspectos. Unas posibilidades que aportan, además beneficios en materia de seguridad permitiendo a los operarios un control de las máquinas cada vez más remoto.
Agilidad y seguridad en las operaciones portuarias: la implantación del 5G brinda la posibilidad de digitalizar muchos procesos aduaneros que a fecha de hoy se realizan de forma manual en el transporte marítimo. El uso de esta tecnología agilizará los trámites, de la mano de sensores, cámaras y sistemas inteligentes.
Digitalización, datos y mejores decisiones: con unos procesos más digitalizados y automatizados se potencia la estrategia centrando recursos en el análisis de los datos en tiempo real para tomar las decisiones más eficientes.
Realidad aumentada y experiencia de usuario: el uso del 5G en la logística supone un paso más en la experiencia de usuario. Permitirá una actualización y control de los movimientos de carga al instante, optimizará la experiencia del usuario en términos visuales y el seguimiento por parte del propio personal de inventarios y procesos.
Y con muchas de las novedades del 5G aún por digerir… el eco del 6G comienza a hacer sus primeras apariciones en escena con avances de información que hablan ya del acceso a conexiones 8.000 veces más rápidas que su antecesor.