En la actualidad, está en vigor el conocido como baremo de sanciones contra la morosidad en el transporte, el cual fue aprobado en 2021. Sin embargo, y pese a que los resultados positivos se pretendían mantener en la propuesta inicial del Reglamento sobre la morosidad que está ahora siendo debatido en el Parlamento Europeo, unas enmiendas de última hora podrían llevar al traste no solo los avances alcanzados hasta el momento, sino también los datos positivos alcanzados con el acuerdo del 2021.
El Reglamento sobre la morosidad que debate el Parlamento Europeo
Inicialmente, el debate que se estaba llevando a cabo en el Paralmento Europeo iba en la línea de mantener las sanciones ya alcanzadas en el conocido como baremo de sanciones contra la morosidad en el transporte de 2021. Es decir, obligar legalmente a respetar los plazos de pago legales bajo pena de multa.
Sin embargo, las enmiendas orientadas a la libertad de pacto podrían llevar al traste con los avances, que han permitido que desde 2021 la media de abono de facturas se reduzca hasta los 60 días de media. Podría parecer poco, pero anteriormente la media era de 90 días.
La normativa acordada en 2021 con el baremo sancionador de la morosidad
El problema está fundamentalmente en que de salir el futuro Reglamento Europeo, el pacto actual que se recoge en el baremo de sanciones quedaría sin efecto. Es decir, el Reglamento quedaría por encima, siendo además norma europea aplicable a todo el territorio de la UE, y los baremos que tanto trabajo costó conseguir, y que efectivamente resultaron útiles estos más de dos años, serían papel mojado.
Principales críticas desde España y problemas que puede ocasionar al sector transportes de continuar las enmiendas propuestas
El debate está siendo duramente criticado por la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad, en la que se encuentra FENADISMER como representante del transporte en España. La libertad de pacto entre partes no puede ser real cuando los operadores de transporte se encuentran, en muchos casos, con compañías gigantescas que imponen sus condiciones. Y es por eso que consideran un error estas enmiendas, que podrían llevar a todo el sector a ver de nuevo incrementados los plazos de pago.
Por el momento, la tramitación de la norma aún puede demorarse, ya que el debate del Parlamento Europeo se está llevando a cabo tras la propuesta de normativa de la Comisión Europea. Esa propuesta inicial sí contentaba a FENADISMER y a otras organizaciones que forman parte de la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad. Así que habrá que ver cómo termina la votación, y cómo se materializan en legislación dichas propuestas y enmiendas.